La olla de presión nos ayuda a preparar una gran variedad de deliciosas recetas de una manera fácil, segura, en menos tiempo y nos garantiza una excelente cocción de los alimentos. Actualmente, se ha convertido en una herramienta importante para cocinar diferentes platillos, incluso algunos la usan para elaborar pasteles.

Trabaja con poca agua, lo que hace posible una mejor conservación de las vitaminas y minerales de los alimentos, señala Cristina Reyes, capacitadora y supervisora de electrodomésticos. Explica: “El agua no hierve dentro de la olla, por lo que el proceso de cocción se acelera con el incremento de la temperatura, lo cual permite que tanto virus y bacterias sean eliminados”.

La chef Aura Equité, del Instituto Técnico de Capacitación y Productividad, Intecap, indica: “La olla de presión es una herramienta que ha facilitado los tiempos de cocción, es útil, fácil y eficaz, ya que al usarla correctamente podemos preparar una diversidad de alimentos y ahorrar gas. En general se usa para hacer frijoles, pero podemos preparar cualquier tipo de comida con la ventaja de conservar sabores, olores y el valor nutritivo de los alimentos”.

Su historia
Se conoce que un primer ensayo surgió en 1679 cuando el físico y matemático francés Denis Papin intentaba crear un recipiente hermético, el cual permitiera aprovechar la presión del vapor para cocinar carnes y otros alimentos en menor tiempo. Sin embargo, la iniciativa no prosperó y fue hasta el siglo XX, cuando la olla de presión fue perfeccionada, comenzó a fabricarse y comercializarse con el nombre con el se conoce actualmente. A partir de 1978 se empezaron a producir modelos cada vez más eficientes y completos.

Mejor rendimiento
Para aprovechar mejor las bondades de este instrumento es importante tener en cuenta lo siguiente:

• Al cocinar pescado es mejor envolverlo en algún material resistente al calor para que no se desmenuce y no dejarlo al fuego más de 10 minutos.
• La carne roja requiere de por lo menos 30 minutos de cocción.
• El arroz también puede cocinarse en la olla de presión, aunque la cantidad de agua es menor, pues se agrega una taza de agua por una de arroz y debes apagar el fuego al escuchar el primer silbido.
• Para cocinar frijoles negros, rojos o blancos, es mejor remojarlos antes. Al momento de escuchar el primer silbido de la válvula debe bajarse el fuego y dejar cocinar por 30 o 40 minutos.
• La capacidad de una olla de cinco litros es de dos libras de alimento, y la de una de siete litros es de tres libras.

Evitar riesgos
Para prevenir cualquier tipo de riesgo al utilizar la olla de presión puedes seguir los siguientes consejos:

• Es importante asegurar su cierre correcto antes de colocarla en la estufa o fuente de calor.
• Al momento de abrirla es recomendable no forzar la tapa, ya que debe ceder fácilmente.
• Al retirarla del calor es importante esperar a que el vapor se disipe antes de abrirla.
• En algunos casos puede ocurrir que la válvula de seguridad se abra durante el tiempo de cocción, si esto ocurre debes retirarla del fuego y esperar a que el vapor disminuya.
• Nunca debemos usarla sin líquido porque puede dañarse.
• La carne siempre debe ser el último ingrediente que añadimos.
• Debemos tener en cuenta que las ollas de presión admiten como máximo de agua dos tercios de su capacidad total, y el mínimo es un cuarto.

Por Claudia Vásquez