A todas las mujeres nos encantan los zapatos, en especial los de tacón. Si acostumbras usarlos todos los días, pon en práctica estos consejos que te ayudarán a evitar las várices en tus piernas.
Ten muchos
Los zapatos son la fascinación de todas, la clave para que los tacones no te hagan daño está en no usarlos todos los días. Alterna entre calzado cómodo y otros que no sobrepasen los 4 centímetros de altura.
Descansa lo suficiente
Mantén las piernas ligeramente levantadas mientras realizas cualquier actividad que lo permita, como: dormir, leer o ver la televisión.
Muévete mucho
Realiza ejercicio a diario, las caminatas o subir escaleras favorece la irrigación sanguínea de las piernas.
Usa plantillas de gel
Estas alternativas resuelven muchos problemas derivados del uso de tacones. Por una parte previenen que los dedos se contraigan y de ese modo evitan las ampollas. Busca plantillas para tacones con la forma del arco del pie que alivian la presión que se ejerce en ese lugar. Si tus dedos constantemente se deslizan a la parte delantera de tu calzado puedes comprar almohadillas diseñadas especialmente para afirmar tu pie.
Tómate descansos de modo regular
Evita usar tacones más de dos días seguidos, mejor deja un día de descanso de intermedio. Si quieres seguir caminando a cuatro pulgadas del suelo debes darle tiempo a tus pies para que se recuperen.