Según la Organización Mundial de la Salud -OMS-, más de 1 millón de personas contraen a diario una ITS, por medio del contacto sexual, fluidos o transfusiones de sangre.
En la mayoría de los casos, las ITS -infecciones de transmisión sexual- son asintomáticas, por ello, tanto los chequeos constantes como tomar las debidas precauciones son necesarias para evitar el contagio o tratarlas a tiempo.
Entre las más peligrosas están:
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Gonorrea
Es producida por el diplococo Nisseria Gonorrhoeae. En el caso de los hombres se manifiesta con pus en el área genital, garganta y un leve dolor al orinar. En el caso de las mujeres es asintomática, pero cuando la infección está avanzada aparece el dolor en el vientre, al orinar y durante la menstruación.
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Sífilis
La bacteria Treponema Pallidum es la causante de esta infección que produce llagas o úlceras. Los primeros síntomas son lesiones sin dolor en los genitales, recto o boca, las cuales aparecen de 2 a 3 semanas desde el contacto y desaparecen luego de 4 semanas. En la etapa secundaria aparecen lesiones en el tórax, palma de las manos y planta de los pies. Los ganglios se inflaman de 2 a 8 semanas. Como tercera etapa aparecen lesiones en la piel, huesos e hígado.
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Virus del papiloma humano- Vph-
El Vph es la infección más común y se da, en un alto porcentaje, en mujeres que llevan una vida sexual activa. Existen más de 100 tipos de virus, por ejemplo: los tipos 6 y 11 causan el condiloma acuminado – crecimiento de verrugas blandas-, mientras que los tipos 16 y 18 provocan cáncer cervical o de pene.
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Hepatitis B
Es causada por el virus que pertenece a la familia Hepadnaviridae. Se caracteriza por la ictericia -piel y ojos amarillentos- y la inflamación del hígado, lo que bloquea el paso de la bilis alterando la función del órgano. Esta infección puede transmitirse no solo por la vía sexual sino también por medio de la saliva.
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Virus de Inmunodeficiencia Adquirida (VIH)
Ataca al sistema inmunológico y es producido por un lentivirus que pertenece a la familia Retroviridae, causante del síndrome de Inmunodeficiencia adquirida -Sida-. Las personas infectadas no siempre presentan síntomas, pero en algunos casos experimentan una especie de gripe e inflamación de los ganglios. Esta infección también puede transmitirse de madre a hijo durante el embarazo o en el período de lactancia.
Fuentes: Yosahandi Alcalá, especialista en educación sexual, yosahandialcala@hotmail.com; Margarito Castro, sexólogo y ginecólogo, teléfono: 2448 2672.
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