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Los sueños, más allá de la conciencia

Los sueños tienen diferentes significados y cada persona busca encontrar una interpretación particular.  Los profesionales indican que su interpretación varía, pues depende del entorno y de las necesidades de cada individuo.

Dormir es un estado de inconsciencia fisiológica, “una necesidad que tiene el organismo para reponer fuerzas, dar paso a cambios metabólicos y, sobre todo, el requerimiento de reordenar, integrar y almacenar el bagaje de vivencias y estímulos recibidos durante el estado de vigilia, o sea al estar despierto un promedio de 16 horas”, señala el médico psiquiatra Erick Von Ahn.
“Los sueños son parte del inconsciente, es una forma de comunicarse con uno mismo”, comenta Hugo Gálvez, psicólogo clínico.  Son un perfil poderoso para analizar el inconsciente, pues en ellos se guarda información que es reprimida por influencia cultural.

Según Von Ahn, los sueños tienen una connotación fisiológica a través del sistema nervioso, por ello si se sueña con algo alarmante o agonizante la persona despertará agitada, con miedo, el pulso acelerado y muchas veces con sudoración.  Pero si el sueño es agradable, las reacciones físicas serán diferentes, igual pasa con los sueños eróticos.
Manifestaciones recurrentes

Los sueños repetitivos se dan según la situación que atraviese alguien, por ejemplo cuando sufre de síndrome postraumático, miedo o angustia, esos temas se repiten días posteriores durante el sueño debido a esa gran carga emocional.

Otra de las razones es porque muchas veces las personas sufren de situaciones reprimidas, las cuales les producen ansiedad o porque están predispuestas a ciertas tendencias que son temas tabú para la sociedad y el inconsciente los aflora en los sueños, enfatiza Gálvez.

Para Carlo Carusso, psíquico, “los sueños repetitivos son secuelas de un pasado que no se trabajó”.  Por ello, el tema estará presente en el inconsciente hasta el momento de cerrar un círculo o la situación de conflicto sea resuelta.

Seres queridos en el más allá

A veces cuando una persona querida fallece es común soñarla, porque la vinculación afectiva de amor y recuerdos son parte de lo guardado en la memoria, además no se acepta la pérdida por el apego.  “El lazo emocional con las personas sigue hasta el momento de su muerte.  Sin embargo, aceptar la realidad hace más fácil sobrellevar la pérdida y con ello los sueños serán menos frecuentes”, señala Gálvez.

“Cuando el ser querido lleva mucho tiempo de haber partido, la emoción y la necesidad de verlo es fuerte y aflora al soñar.  Cuando se deja de reprimir esa añoranza disminuyen sus representaciones oníricas”, explica Von Ahn.

¿Por qué no siempre los recordamos?

Muchas veces al despertar se está consciente de lo soñado durante la noche, pero conforme los minutos pasan la imagen del sueño se desvanece y se pierde en el tiempo, esto sucede porque el cerebro se oxigena.  “Cuando la persona duerme el cuerpo está en total descanso, por ello necesita menos oxígeno para funcionar, esto mismo ayuda a que los sueños se den.  Pero al momento de despertar y respirar normalmente el cuerpo vuelve a su actividad normal y la información regresa al inconsciente.  El miedo bloquea los sueños”, indica Carusso.  Para Gálvez “todo aquello que no es aceptado por la sociedad o por uno mismo será reprimido por la mente y por ello se olvidará esa representación inconsciente”.

¿Qué mensaje llevan?

“El significado de los sueños es un arquetipo, es decir que son modelos de ideas del pensamiento y en algunas culturas suelen popularizarse, por lo tanto, cada uno le dará la interpretación que mejor le parezca”, señala Gálvez.  Por su parte Von Ahn, comenta: “La interpretación de los sueños no es como las recetas de cocina, es decir, no puede generalizarse su significado”.

Los profesionales coinciden en que para una interpretación seria debe hacerse un estudio y un análisis de cada persona, de su entorno y su forma de vida, así como de su pasado y los problemas que le afectan.

Carusso explica que para encontrar el significado de las expresiones oníricas es necesario conocer y reconocer cuales son las fobias y los anhelos de cada uno, ya que estos estados emocionales se representan con facilidad “si se tiene miedo a las serpientes, se soñará con serpientes”.  Los sueños que aparentemente se ven como premonitorios se basan en alguna vivencia del momento o se darán debido a los acontecimientos actuales en el entorno.

“Muchos de los sueños que se toman como premonitorios se derivan de experiencias vividas y son guardadas dentro del inconsciente.  El consciente no se acuerda, por ello si se repite alguna de estas actividades o se parece a las vividas, la alerta se activará y podrá ser emitida mediante los sueños”, enfatiza Carusso.

[“Los sueños negativos en la actualidad se atribuyen a la situación de violencia y temor de ser víctima de un asalto o de ser perseguido, y todo ello se refleja en la angustia de la persona con relación a lo que pueda pasarle a sus seres queridos o a él”, Hugo Gálvez, psicólogo clínico.]

Fuentes: Erick Von Ahn Rodas, médico psiquiatra, teléfono 2361-1484.  Hugo Gálvez, psicólogo clínico, teléfono 5702-6004.  Psíquico Carlo Carusso, www.carlocarusso.over-blog.com  www.carlocarusso.blogspot.com  Libro Interpreta tus sueños, Editorial Swing Y. Soliah.

En cada cultura

En cada pueblo los sueños tienen un significado, y a pesar de que los especialistas señalan que cada uno debe ser analizado individualmente las personas buscan respuestas en explicaciones mágicas propias.

Soñar con desnudez:
No hay que confundir la desnudez con la falta de ropa.  En el primer caso es un sueño agradable, que implica el deseo de vernos libres de fingimiento e hipocresías, mientras el segundo es un sueño desagradable de impotencia y desamparo.

Cisnes: Blancos gloria y fortuna; negros, inmoralidad.

Víbora: En este domina más lo negativo, y se le añade el temor de encontrarnos en una situación de compromiso, de graves peligros y traiciones que pueden ser exteriores o provenir de nuestros instintos inferiores.

Fuego: El símbolo del espíritu y la llama, mezcla del fuego y aire, de inteligencia superior.  Soñar llamas que ascienden anuncia grandes ideas y sentimientos que iluminarán la existencia.  Soñar un fuego humeante y devorador revela el peligro de pasiones exaltadas que conducen a la ruina, especialmente si nos quemamos.  Pero si es una llama tímida y temblorosa, el mensaje es de moderar las aspiraciones.  Atizar el fuego indica deseos de venganza.

Artistas: En nuestros sueños el artista casi siempre adquiere una dimensión peyorativa, similar a la del payaso, por lo que se recomienda mayor serenidad en la vida profesional o social.

Nupcias: Soñar con una boda puede ser parte de revelar el deseo de casarse, pero tiene otras acepciones.  En la adolescencia refleja el deseo de consolidar su personalidad.  En una persona ya casada indicará  un deseo inconsciente por otra pareja.  Casarse con alguien del mismo sexo revela racismo.

Vacas: Simbolizan la paciencia y la riqueza.  Cuando las que soñamos son gordas y lustrosas anuncian riqueza y prosperidad.  Flacas y desnutridas, pobreza y miseria.

Rita María Aguilar

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