Ojos lindos
Reduce la fatiga visual y la irritación al usar un antifaz térmico que te ayude a reducir la inflamación y las bolsas que se forman debajo de los ojos. Aplica además una crema hidratante de día y por la noche usa un suero reparador.
A prueba de lluvia
Lo más importante en el maquillaje para un día de lluvia es aplicarte una base a prueba de agua para que luzcas linda por horas. Recuerda retocarla por la tarde y sellarla con polvos sueltos traslúcidos.
Codos hidratados
Cada tres días al ducharte usa un producto para exfoliarlos y remover las células muertas.
De esta forma los productos humectantes penetran mejor.
Cuida tus rizos
El cabello rizado es propenso a resecarse. Para evitarlo antes de peinarte aplica un producto especial y desenreda con los dedos.
Labios hermosos
Remueve las células muertas de tus labios al darles un masaje con un cepillo extra suave. Para mantenerlos humectados prepara compresas a base de papaya o piña, deja actuar por unos minutos y luego enjuaga.
Uñas blancas
Si tus uñas lucen marchitas y amarillentas blanquéalas al frotarlas gentilmente con un algodón empapado de vinagre blanco o remójalas una vez por semana en agua caliente mezclada con agua oxigenada.
Cabello hermoso
Protege tu cabello del agua de lluvia al aplicarle aceite de argán y un tratamiento que selle las hebras y evite que se esponjen, o usa un poco más de acondicionador.
Nariz roja
Si te da gripe evita lucir una nariz irritada al aplicarle ungüento durante las noches, esto ayudará a la descongestión y mantendrá la piel del área hidratada.
Jabón de aloe
Esta alternativa para el baño contiene propiedades hidratantes, cicatrizantes, antisépticas y hasta antiinflamatorias. Es una buena alternativa para regenerar tu cutis y reducir el acné.
Manos suaves
Prepara un hidratante natural al moler la pulpa de un aguacate maduro, combina con seis cucharadas soperas de avena, dos onzas de aceite de almendras y dos de agua y aplica dos veces al día.
Cuello más joven
Coloca sobre tu cuello limpio una mascarilla preparada con dos cucharaditas de miel pura, dos de aceite de oliva y dos yemas. Deja actuar por 15 minutos y enjuaga con agua tibia.
Por Rita María Aguilar