Cómo pasar de emprendedora a empresaria

Tener el sueño de emprender un proyecto, hacerlo realidad y luego disfrutar sus recompensa, es un proceso que requiere varios pasos. Conoce cuáles son e intégralos a tu estrategia para pasar de emprendedora a empresaria.

Por Yeni Leiva

Si eres de las mujeres que persiguen su meta y atraviesan todos los obstáculos hasta convertir su sueño en todo un negocio productivo, sin duda te interesa saber cuáles son las estrategias para dar los primeros pasos. Karla Hernández, psicóloga e instructora de emprendedurismo, menciona que todo empieza con avivar la idea, no rendirse frente a cualquier fracaso, aprender constantemente de los errores y saber reconocer el pensamiento de innovación y de riesgo. Atiende los siguientes puntos para pasar de emprendedora a empresaria.

• Combinado a esos primeros pasos será necesario reconocer tus propias características. Es decir, saber de tu ambición, ser realista, responsable y proactiva. No te olvides de añadir una buena dosis de perseverancia y saber que siempre tienes nuevas oportunidades para ser emprendedora.

• Abre tu mente y acepta opiniones, toma en cuenta que no siempre tendrás la razón y a veces funciona conocer el punto de vista ajeno para apropiarte de lo positivo.

• Aprovéchate de tu creatividad para solucionar los problemas. Para eso es básico tomar estrategias como la buena comunicación, saber organizarte, buscar aliados y centrarte en los objetivos.

A partir de esos elementos básicos podrás entonces definir qué venderás u ofrecerás. No obstante, enfócalo como qué necesidades se van a cubrir para el público, a quién se lo vas a ofrecer y cómo lo venderás. Busca estrategias, es probable tengas que hacer más de lo esperado, pero al obtener resultados positivos verás cómo estás lista para dar el siguiente paso y así empezar a expandir tu mercado.

Lo anterior significa encontrar a los productores, vendedores y consumidores de tu servicio o producto. Ten en cuenta, durante ese proceso te toparás con algunos tipos de compradores: los reales, los potenciales y los que generan la demanda.

Los compradores reales son quienes de inmediato adquieren tu producto. Los potenciales son aquellos a quienes puedes interesar en la adquisición de tu producto, y los que generan demanda, es decir que insistirán en adquirir tu producto.

Fuentes: Karla Hernández, psicóloga e instructora de emprendedurismo, del Programa Mujeres Emprendedoras del Centro Comercial Portales, Empresarios Juveniles, www.portales.com.gt