“Mi perro bebe mucho, ¿eso es normal? “, es una pregunta que se hace a menudo a los veterinarios. Cuando el experto inquiere qué cantidad de líquido ingiere el animal, los propietarios de las mascotas suelen ignorar la respuesta.
Por: DPA
Según Tina Hölscher, veterinaria de la organización alemana Aktion Tier, lo primero que tienen que hacer los dueños es determinar exactamente cuánto beben sus perros.
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La mejor manera de hacerlo es poner una cantidad medida de agua en el cuenco de agua de la mascota por la mañana y medir a la mañana siguiente lo que queda.
A ello hay que añadir la cantidad de líquido que absorben los animales a través de los alimentos. Es la única manera de obtener valores exactos.
Los alimentos enlatados, por ejemplo, contienen un 80 por ciento de líquido, por lo que si el perro ingiere una lata de 400 gramos hay que contabilizar 320 mililitros de agua.
El alimento seco puro carece de porción líquida.
Además, el día que se lleve a cabo la medición, es importante asegurarse de que el animal no beba de los charcos o riachuelos. Según explica la veterinaria, esto falsificaría el resultado.
Como norma general, Tina Hölscher aconseja que en días que no se registren temperaturas extremas y el animal realice una actividad media, el consumo de 100 mililitros de agua por kilo de peso corporal estaría dentro del rango saludable.
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Así, un perro de 10 kilos no debería necesitar más de un litro de agua en 24 horas.
dpa
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