Las novias de Da’Costa

Telas de manta cruda, aplicaciones elaboradas en el milenario telar maya de cintura, velos de gasa, detalles en yute, trenzas, henequén y adornos de tusa son algunos de los materiales utilizados por Lorena Da’Costa.

Erupción de colores y culturas se reflejan en las dos grandes colecciones que ha presentado Da’Costa a lo largo de su carrera. Cada pieza lleva terminaciones de patrones elaborados con precisión y talle perfecto.

La mezcla de texturas es evidente en cada diseño. La manta, para la diseñadora, es una de las telas perfectas para realizar diseños originales, sofisticados y únicos. Asimismo, disfruta del uso del chiffón, seda cruda y podesua. Su actual colección está influenciada por la pasarela internacional la cual viene marcada con vestidos con mucho volumen, encajes, flores y aplicaciones de plumas.

¿Quién es Lorena Da’Costa?

Es una reconocida diseñadora que ha captado la atención del público guatemalteco gracias a su talento en la confección de vestidos de novia y de cóctel. Su creatividad en la costura es herencia de su madre quien le diseñaba su ropa desde niña.

Según palabras de la diseñadora: ‘Cuando mi madre estaba cosiendo, yo la vigilaba esperando el momento que ella se levantaba para utilizar ese maravilloso aparato’.

Las primeras creaciones de Da’Costa fueron diseñadas para muñecas. A los 25 años decide inscribirse en la escuela de corte y confección Judith Serrano de Prado, para encaminar su sueño. Años después se entera de que existe la carrera de diseño de modas en Guatemala y decide introducirse en este maravilloso mundo.

Al terminar sus estudios se enfrenta a la realidad de la falta de oportunidades en el área de moda. Sin embargo, decide formar parte de una tienda de ropa para niños, cuya responsabilidad era armar colecciones junto a la dueña del lugar.

Un tiempo después se traslada a la fábrica Alfred Angelo, una firma de vestidos de novia, como encargada de producción. Allí aprende sobre la importancia de crear piezas sin errores y caída perfecta. Pero a pesar del aprendizaje, la diseñadora considera que le hace falta más preparación.

Emprende su viaje a Milán, para continuar su formación en el Instituto Europeo de Diseño. Al terminar sus estudios se queda haciendo prácticas por tres meses durante los cuales se nutre de la tendencia de moda, pasarela y producción. Su deseo de superación la lleva a distribuir su hoja de vida en firmas de renombre como Valentino, Gucci, Prada y Armani.

Para su sorpresa la oportunidad se presenta en la casa de modas de Valentino y decide trasladarse a Nueva York. No obstante, luego de tres meses la firma no puede contratarla por la falta de permiso de trabajo. Aquí es donde decide regresar a Guatemala e iniciar su propio negocio. Da’Costa en la actualidad cuenta con mucha aceptación y no descarta la idea de internacionalizar sus diseños.

Por Brenda Enríquez
Foto: Julieta Ordóñez y cortesía Lorena Da’Costa