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6 factores que pueden motivar al divorcio

Cuando la relación enfrenta una crisis es bueno que lo tomes con paciencia y recuerdes los momentos buenos que los unió, asimismo es preciso indagar el problema y tratar de solucionarlo. De acuerdo con los especialistas existen seis factores que pueden contribuir a ponerle fin a la unión de pareja.

De acuerdo con JHohn Gray, escritor del libro Marte y Venus, todo se resume a la falta de atención a las necesidades de los demás.  Al principio de una relación, incluso con un reducido nivel de dopamina, un hombre siente la necesidad de darle gusto a una mujer porque el desafío de gustarle estimula la dopamina.  Una vez que el desafío desaparece, el nivel de la sustancia se viene abajo.  Si además se añade la rutina, la caída es mayor incluso en medio de un ambiente de gran amor.   No obstante, esta reacción puede afectar el déficit de serotonina de forma dramática en la mujer y  destruir  la relación amorosa.

Existen varios factores que  descontrolan el bienestar de la pareja, los especialistas nombran algunos como los más frecuentes, ¿te interesa conocerlos? Te lo contamos:

  1. No tengo tiempo para nosotros, pero de verdad te amo

En algunas ocasiones el trabajo puede ser fuente de desgaste de la relación de pareja  lo que afecta más a los adictos al mismo que descuidan la familia por las largas horas laborales.  Sin embargo, aunque al principio exista cierta comprensión por parte de la pareja, con el tiempo provoca distanciamiento y como consecuencia empobrecimiento en la intimidad e intercambio afectivo, explica Margarito Castro, psicólogo y sexólogo.

De acuerdo con Carmen Aceituno, psicoterapeuta el no dedicar tiempo a la pareja puede ser tomado como indiferencia y agresión pasiva.  Es importante entender que el convivir con otra persona es un compromiso que requiere tiempo de calidad para enriquecer la relación.   Es necesario recordar que, así como se programa un tiempo para alguna actividad de negocios, de igual forma  se debe agendar tiempo para compartir con la pareja.  Toma en cuenta que no necesitas hacer cosas extravagantes por ejemplo pueden salir a caminar, correr o ir a cenar juntos.  Toma en cuenta que la diferencia entre las parejas satisfechas es la manera que administran, aprovechan y disfrutan su tiempo.

2) Intoxicación de la familia política

El problema con la familia es complicado sobre todo al inicio de una relación, porque el cambio de vida lleva a complicaciones inesperadas.   Ana Lucía Wever, psicóloga clínica explica que al momento de tener pareja o casarse, se  debe  tener independencia y una readaptación a otro sistema de vida que ambos construyan.  Sin embargo, para que esto suceda es necesario entender las costumbres de la familia de nuestra pareja  y así llegar a negociaciones y hacer un nuevo sistema de convivencia.   De acuerdo con Aceituno uno de los errores más comunes es contar los problemas de pareja a los padres, esto provoca que los progenitores por preocupación  interfieran en cada conflicto que surge en la vida marital.   A esto se suma que en la mayoría de los casos a los padres les cuesta trabajo entender que su hijo o hija es un adulto independiente y que, a partir del momento que entabla una relación de pareja, los padres deben tomar distancia, respetar ciertos límites y aceptar que: Ellos ya no son responsables de sus hijos y las prioridades de éstos  y su tiempo han cambiado esto no quiere decir que dejaron de querer a los progenitores sino por el contrario son otras sus prioridades, nos cuenta Castro.

Wever recomienda que, al tomar la decisión de convivir con la pareja, no vivan en la casa de la familia política, ya que  esto pone en riesgo la relación de pareja porque la familia política siempre interfiere, acción que resta privacidad al nuevo hogar.

3) Dinero, el tercero en discordia

Aunque es un tema difícil y del nadie quiere hablar es necesario que  discutan sobre las finanzas  y la administración de hogar.   Cuando no existe un presupuesto en cuanto al manejo del dinero  siempre una de las dos partes  llega a tener mayores responsabilidades lo que limita las necesidades propias.   Presionar a la pareja para gastar más dinero del que dispone, es una receta al desastre en la vida marital, explica Castro.

Es necesario que cada uno pueda hablar de forma abierta de sus ingresos, gastos, metas y  opinar de cómo administrar el dinero para satisfacer las necesidades de ambos, toma en cuenta que los objetivos a alcanzar ahora son en pareja.   El dinero mal administrado por uno de los cónyuges desencadena tarde o temprano molestia, confrontación y muchas veces ruptura de los matrimonios.

4) La libertad es más que un derecho

Existen parejas tan absorbentes que parecen siamesas, no pueden dejar sola a su amado o amada  ni un solo momento lo que resulta intoxicante para convivencia.   Los matrimonios saludables gozan de cierta libertad de parte de cada uno de sus miembros, esto no quiere decir que no tengan actividades en conjunto, sin embargo, también  se debe entender que cada persona tiene su mundo o espacio personal, el cual incluye intereses propios como el trabajo o viejas amistades.

Considera que cuando una persona pierde su libertad, suele presentar  ambivalencias entre amor y rechazo, capaz de causar mucha confusión y malestar a nivel personal.   En una relación estable  no debe existir dependencia sino por el contrario mucha confianza, sentir la confianza que donde el ser amado se encuentre el respeto y la fidelidad prevalecerán, sobre todo.

5) Tareas domésticas responsabilidad de ambos

En la mayoría de los casos, aunque las mujeres trabajen fuera del hogar al llegar a casa realizan también  tareas domésticas, lo cual no resulta justo.  Es saludable distribuir las tareas dependiendo el tiempo disponible, pero, también de las habilidades que cada uno posea.   Toma en cuenta que cuando las reglas son claras cada uno sabe sus responsabilidades y la relación marcha con un aura de armonía y paz.

6) El amor sigue presente pero la pasión deserto

La sexualidad constituye el valor más íntimo de cualquier pareja por ello, es necesario protegerla, respetarla  y conservarla.   Sin embargo, existen ciertos hábitos que puede terminar con la pasión como la rutina diaria, la falta de tiempo y  de atención a la pareja.

Fuentes:   Dr. Margarito Castro Rodríguez, con maestría en psicología y salud mental, teléfono 2448-2672.  Licda.  Carmen Aceituno, psicóloga clínica, teléfono 4216-9969. Carmen_aceituno1hotmail.com.   Licda. Ana Lucía Wever psicóloga clínica, teléfono 5800-4880.  Libro Marte y venus de John Gray editorial Oceano.

 

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