Nuevos métodos de aprendizaje para niños

Entre los objetivos de estos métodos está el poder ayudar al estudiante a desarrollar sus destrezas, liderazgo, trabajo en equipo y creatividad.

De acuerdo con Iris de Flores, directora académica de Asociación para el Desarrollo Educativa (APDE), las habilidades pueden empezar a desarrollarse desde que el bebé está en el vientre como el escuchar a los padres, cierto tipo de música y habituarse a ciertas rutinas que ayudan mucho.

Existen muchas habilidades que pueden empezar a desarrollarse en los niños como el autocontrol. Desde bebés, podemos enseñarles a controlar sus impulsos y saber comportarse en distintos momentos y ambientes. Hablarle al bebé de manera serena contribuye a ese autocontrol, por ejemplo.

• Connections se basa en la autonomía y forjar destrezas que les permitan tomar decisiones, resolver problemas cotidianos y principalmente realizar tareas que ya pueden a su edad. Esto implica que los padres de familia y maestros procuren esos espacios y eviten resolverles todo o acondicionarles todos los ambientes en función del niño y no al revés. Si favorecemos esos momentos de autonomía, automáticamente estamos promoviendo  el desarrollo de la creatividad, juicio crítico, autocontrol y lenguaje (que puede ser verbal o no). Todas las destrezas que tienen que ver con su cuerpo son fundamentales.  Propiciar juegos en donde exista estimulación de las extremidades, movimiento, que permitan tocar, moldear, estirar, etc, son otro tipo de destrezas claves para la motricidad gruesa y fina tan necesaria en esas edades. Un niño aprende jugando, moviéndose e idealmente con mucha estimulación auditiva.

Según Iris de Flores, se recomiendan métodos educativos que tengan como objetivos prioritarios desarrollar la creatividad, autonomía, resolución de problemas, toma de decisiones y desarrollo del lenguaje (competencias más demandadas en siglo XXI). Los niños aprenden naturalmente a través del juego.  EL método que haga uso del juego como principal técnica es el que más recomiendo.

Iris de Flores enlista los factores claves para favorecer el aprendizaje son:

1. Ambientes de aprendizajes amplios y versátiles: el niño no aprende únicamente dentro de un salón de clases.
2. Aprendizaje basado en movimiento y juego: para el niño es natural el juego y el movimiento. Partiendo de ello se pueden lograr muchos aprendizajes y más significativos.
3. Estímulos correctos con una intencionalidad específica (no exceso de estímulos)
4. Acompañamiento personal para dar seguimiento a sus aprendizajes: lo que importa es el avance de cada niño respecto a él mismo.
5. Desarrollo del lenguaje como eje central.

¿Cómo ayudar a los niños con su aprendizaje en pandemia?

1. Seguimiento uno a uno.  La pandemia ha requerido más que nunca de un seguimiento personal para tratar de mantener el interés de los alumnos. También ha requerido repensar qué enseñamos a través de la pantalla y qué puede desarrollarse sin el uso de ella.
2. Manejo adecuado de las emociones. Sentirse aburrido, enojado, triste, etcétera es parte de muchos sentimientos en esta pandemia. Lo más importante es reconocerlos y apoyar para plantear con sentido positivo los retos de esta pandemia.
3. Repensar los aprendizajes y cómo lograrlos es sin duda el mayor reto de los profesores en esta época.
4. Apoyar principalmente el aspecto emocional de cada estudiante considerando que cada familia puede  estar en circunstancias muy diferentes.
5. Retroalimentar y dar oportunidades de enmendar o rehacer.

¿Cómo apoyar a los niños para que se preparen para ir a clases?

La mejor manera de apoyarles es explicarles las bondades que tiene la presencialidad.  A su manera, pero cada padre de familia puede insistir en esto y sin lugar a duda, los hijos lo recibirán mejor:

• Menos distracción. La presencialidad te permite regresar a una estructura de horario/jornada. La distracción en casa es mucho mayor que dentro del aula con otros compañeros y maestros.
• Salud mental. Cambiar de ambiente  es saludable para la salud mental además de estar en contacto con otras personas diferentes a tu familia.
• Aprender de otros. El aprendizaje también es social. Escuchar la opinión de otros, trabajar en equipo, estar con compañeros de tu misma edad te permite aumentar tus aprendizajes.
• Una mejor combinación del tiempo en pantalla vs contacto con otros.  Pensar que la educación presencial te permite compartir con otros y en otro momento del día trabajar a través de una pantalla es mejor combinación que estar todo el día conectado a un dispositivo.

Fuente: Iris de Flores, directora académica de Asociación para el Desarrollo Educativa (APDE)