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Reconstruyendo Vidas: Mujeres unidas contra el cáncer

Con el objetivo de prevenir, atender y ayudar a pacientes con cáncer de mama para que reciban un trato digno, surgió la asociación no lucrativa Reconstruyendo Vidas.

El pasado 15 de abril de 2015 nació legalmente constituida la asociación Reconstruyendo Vidas y su misión es velar por un tratamiento integral para pacientes de cáncer de la red hospitalaria nacional y que cada paciente cuente con un trato digno y humano tanto para hombres y mujeres.

Su visión es incidir en las políticas y presupuestos públicos para que el Estado brinde tratamientos integrales para todos los pacientes con cáncer, buscar apoyo de la sociedad guatemalteca, realizar capacitaciones y talleres para instruir a los pacientes y asociados para campañas de detección temprana y sensibilización del cáncer a toda la población guatemalteca.

“Nuestro nombre nace de lo que como seres humanos nos pasa al recibir la noticia cuando uno es diagnosticado con cáncer, en ese momento se nos derrumba la vida y consideramos que es nuestra etapa final pero pasaos por procesos muy difíciles tanto físicos, espirituales y emocionales pero nacemos de nuevo, tenemos una nueva esperanza e iniciamos a reconstruir nuestra vida”, comenta Vilma de Vásquez, presidenta de la asociación.

En el logo de la asociación se puede observar que hay una pared que se construye con ladrillos y cada uno significa el apoyo mutuo, el trabajo en equipo, la fuerza entre mujeres y el trabajo de reconstruirse en todas las áreas de la vida.

“Un muro de esperanza de vida para todas aquellas que aún no han pasado por estos procesos, pero que no sabemos en qué momento podría sucederles. Es un muro de esperanza porque al reconstruirnos llevamos el mensaje de detección temprana y por cada mujer diagnosticada en tiempo es un ladrillo más en ese muro”, comenta de Vásquez.

La labor que realizan

La navegación de pacientes es una de las actividades principales. Desde sus inicios se practicaba la navegación de pacientes de una forma empírica y sin el conocimiento que existiera una labor que ya fuera reconocida. Este acercamiento ha permitido visualizar las dificultades que los pacientes con cáncer atraviesan.

-Defensoria de pacientes oncológicos, para que reciban una atención digna y humana.

-Monitoreo de abastecimiento de medicamentos en el Hospital General San Juan de Dios.

-Empoderamiento a pacientes sobre nuestro derecho a la salud.

-Charlas educativas sobre detección temprana de cáncer de mama y cérvix.

“Nos capacitarnos constantemente con talleres , actualmente nos estamos certificando como navegadora con la Navegación Internacional de Pacientes”, comenta Vilma de Vásquez.

 ¿A cuántas mujeres ayudan con los tratamientos en el año?

La Asociación Reconstruyendo Vidas, ha apoyado a 200 pacientes brindándoles una referencia, procurando que sean atendidas a la brevedad posible con un tratamiento integral (revisión médica, cirugía y tratamiento).

Acompañamiento en encamamiento (visita y atención en necesidades de cada paciente) oscila en 150 a 200 pacientes.

La asociación ha beneficiado a mil pacientes por año para que reciban un tratamiento de cáncer con las acciones que brinda a la población por el derecho a la salud y el monitorio constante que esta realiza para que no exista desabastecimiento de medicamentos.

¿Quiénes integran la asociación?

Vilma de Vásquez comenta que son una asociación no lucrativa, que sobrevive con donaciones y está integrada por un grupo de mujeres sobrevivientes de cáncer de mama que apoyamos a pacientes oncológicos en el Hospital General San Juan de Dios.

Historia

Ante la falta de un tratamiento integral para pacientes con cáncer de mama y diversas denuncias a una institución, la Procuraduría de Derechos Humanos brindó asesoría para empoderar a las pacientes y hacer frente a la crisis que estaban viviendo y así fue como empezó una colectiva de mujeres que tomó el nombre de “Colectiva Reconstruyendo Vidas” y estaba integrada por pacientes y sobrevivientes de cáncer de mama.

“Las autoridades del Hospital General San Juan de Dios, decidieron enviar a los pacientes de tumores sólidos al Incan, pero los pacientes debían pasar por un filtro de trabajo social que generalmente les negaba el apoyo a los tratamientos y debían ser pagados. En su mayoría no recibían sus tratamientos por lo que se produjeron muchas muertes”, comenta Vilma de Vásquez.

Según la presidenta de esta asociación, en 2014 se llevaron a cabo diversas reuniones con diputados, Derechos Humanos, entidades involucradas en la atención al paciente con cáncer y así como encuentran varias anomalías en el convenio y se evidencia que los pacientes han pagado sus exámenes, consultas y tratamientos.

La perseverancia y la lucha de varias mujeres lograron que de 2013 hasta la fecha los hospitales General San Juan de Dios y Roosevelt hayan brindado tratamientos de quimioterapia. El aumento de médicos oncológicos y personal de enfermería.

Los pacientes del interior del país puedan ser remitidos a los hospitales nacionales, gratuidad para el paciente oncológico en la Liga Nacional Contra el Cáncer, apoyo de la PDH para el abastecimiento de medicamentos para los hospitales oncológicos.

La Asociación Reconstruyendo Vidas, recibe el reconocimiento en abril del 2017 por apoyo y solidaridad a pacientes oncológicos de manos de la Dra. Zulma Calderón de la Comisión de Salud de la Procuraduría de los Derechos Humanos.

Retos en la pandemia

“Hemos enfrentado varias barreras al no poder dar un acompañamiento personalizado, pero lo hemos realizado vía telefónica siempre pendiente del paciente, gracias a Dios en el Hospital General San Juan de Dios, no han dejado de atender a los pacientes oncológicos, aplicando quimioterapias a pacientes que ya están en tratamiento y los médicos oncólogos atendiendo constantemente a quienes buscan su atención. Para nosotros los pacientes oncológicos es una bendición el Hospital el Hospital General San Juan de Dios”, comenta Vilma de Vásquez.

Fuente: Vilma de Vásquez, vilmavasquez_mk@yahoo.com/ Presidenta de la Asociación Reconstruyendo Vidas.

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