Perder el deseo de tener sexo con la pareja puede deberse a muchas cosas, desde el cansancio hasta la falta de iniciativa. Cualquiera que sea el motivo actúa de inmediato para no dejar que tu relación muera.
Los factores más comunes que suelen disminuir el deseo sexual son:
El estrés
Hace que la cantidad necesaria de hormonas disminuya, lo cual reduce las ganas de tener sexo. Entre tanta presión es normal que uno o ambos no tengan ganas de tener ningún tipo de contacto sexual. En estos casos es importante separar el trabajo de la vida personal para no permitir que la pareja resulte afectada.
Cansancio
¡Ahora no, estoy cansada! ¡Vengo muerto! Argumentos como estos cada vez son más frecuentes entre ambos, pues la presión laboral y el exceso de trabajo son el pan de cada día. Para no dejar que esto afecte su relación, es necesario organizarse bien, alimentarse correctamente y descansar.
No hay iniciativa
Esperar a que la pareja tome la iniciativa todo el tiempo es cosa del pasado. Ambos tienen en sus manos el poder de seducir y despertar el interés en el otro. Un estudio publicado por la revista Psychology Today y Redbook Magazine revela que tanto hombres como mujeres tienen el mismo interés sexual. Así que, ¡manos a la obra!
Falta de creatividad
Practicar siempre las mismas posiciones, en el mismo lugar y con la misma frecuencia mata la pasión de cualquiera. Cuando la relación cae en la monotonía tiende a aburrir y a disminuir el interés. El sexo debe ser divertido y diferente. Para despertar el deseo, experimenten cosas nuevas y salgan de la rutina.
Poco contacto físico
El apetito sexual se reduce ante la falta de contacto físico. Una persona que no abraza o no tiene ningún tipo de atenciones con su pareja, hace que esta se sienta poco apreciada y valorada. La ausencia de besos, abrazos y caricias baja la líbido.
Fuentes: sexóloga Yosahandi Alcalá, yosahandialcalá@hotmail.com. Revista Psychology Today y Redbook Magazine
TAMBIÉN TE PUEDE INTERESAR
s