Las amigas son personas sumamente importantes en nuestra vida, algunas personas suelen decir que son “la familia que se elige” y es que nosotras decidimos a quién brindarle nuestra amistad.
El problema es que a veces, elegimos amistades que con el tiempo terminan haciéndonos daño. Como cualquier relación, la amistad lamentablemente puede volverse tóxica.
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A continuación enlistamos estas razones por la que una amistad se vuelve tóxica:
Falta de reciprocidad
La amistad como toda relación se construye de a dos. Las partes dan y las dos partes reciben. Ese es, básicamente el equilibrio indispensable dentro de cualquier vínculo humano.
Cuando una amistad se vuelve tóxica, ese equilibrio se rompe, entonces eres tú la que siempre da y nunca recibe nada a cambio como una palabra de aliento, un hombro donde llorar, una mano que te levante de una situación difícil.
Criticarte
Muchas veces la crítica de una amiga es la única opción verdadera que vamos a tener sobre un tema. Pero es diferente cuando la crítica, permanentemente, va dirigida a hacerte sentir mal. Ese tipo de amistad tóxica muchas veces usa la crítica para sentirse superior a ti.
No hay confianza
Si pierdes la confianza una y otra vez de una persona a la que consideras verdaderamente tu amiga, puede tratarse de una relación tóxica.
Todos podemos equivocarnos pero si hay alguien en quien confiaste se le escape un secreto es señal de que sea mal amiga.
¿Cómo decirle adiós a una amistad tóxica?
Sabes que tienes que decirle adiós cuando la persona a tu lado no hace que salga lo mejor de ti, te hace sentir mal, no te aporta nada bueno, te decepciona y definitivamente no te respeta.
Reconoce que son malas para ti: El primer paso inicia en estar seguro de que esas amistades no son buenas para ti. Reconócela y distínguela de tus demás amigos.
Ten en cuenta qué es lo que quieres en tu vida: Crea un escenario en tu mente e imagina lo que podría ser tu vida sin esa amistad tóxica. Piensa en lo que te haría falta para lograrlo, plantea los métodos para hacerlo y ponte firmes.
Decide si puedes abordarlo de frente o no: A veces es necesario hablar de este tema con la persona pero debes deducir si tendrá la madurez para enfrentar este tema. Si crees que esta plática puede volverse una discusión es mejor dejar todo por la paz.
Lazos positivos: No seas la amistad tóxica del otro. En tus relaciones de trabajo y con tus demás amigos enfócate en atraer todo aquello que deseas y dándolo primero tú misma.
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