¡No te compliques! Si quieres empezar el año con buenos hábitos, aquí te ayudamos con algunos consejos.
Llega un año más, y con ello, la presión por cumplir algunos objetivos. Quizás escuchas de quienes insisten en meterse a un gimnasio, cambiar de dieta, aprender un idioma, leer más… ¿Y tú?
Tú, pues no te preocupes. Es probable que por varios años ya hayas pasado por la tarea de hacer una lista de lo que te gustaría cumplir o hacer, pero que no consigues cumplir. En parte es porque sí, necesitamos aplicarnos, pero también porque a veces tratamos de conseguir algo que, realmente, está fuera de nuestro alcance.
Porque nuestro tiempo, energías y recursos (dinero) son limitados. Ya es bastante ir a un trabajo en la oficina o administrar un hogar. Aún así, hay algunas cosas, y algunos métodos, que sí se pueden cumplir. No tienes por qué ponerte unos grandes propósitos. Pueden ser pequeños pero, todavía así, dejarte una gran satisfacción.
1 – Ser más responsable (con ayuda de la tecnología)
Seguro ya tienes mucho qué hacer. Pagos, entregas, compromisos, eventos… Y quizás te sea difícil cumplir con todos o, en algunos casos, olvidarte de ellos. Hay quienes, de buena manera, saben llevar una agenda, apuntando sus eventos y pendientes, revisándolos constantemente.
Puede que tú cada año compres una agenda con la intención de ser más organizada, y en unas semanas ya olvidas anotar tus tareas. Por eso, puedes usar algo que seguro ya tienes y va contigo a todas partes: tu celular.
Existen varias aplicaciones que se vinculan con tu calendario para enviarte recordatorios a tu correo electrónico y con notificaciones que suenan en tu teléfono. Por ejemplo, si tienes un correo electrónico de Gmail, aprovecha el calendario para apuntar eventos, los cuales incluso puedes enviar a más personas para que ellas también estén enteradas. O también usa las alarmas en tu teléfono para recordarte de tomar una pastilla o recordatorios diarios, como el siguiente.
2 – Hacer ejercicio (con pequeñas rutinas)
El gimnasio no es para todas… No te preocupes. Si bien el ejercicio se suele relacionar con más de una hora de pesas, o bicicleta, y sudar y bajar de peso, no siempre tiene que ser así.
El ejercicio sirve también para sentirte con energía y hacer que tu cuerpo esté saludable. Para ello, puedes comprometerte a hacer diez minutos de ejercicios al día. Puede ser salir a caminar o levantarte de la silla en tu trabajo. Desde tu oficina puedes hacer ejercicios con los brazos, como subir y bajarlos, o caminar en las calles cerca de tu casa.
Coloca un recordatorio diario y trata de cumplirlo. Puedes buscar rutinas de pausa activa en internet. Date tu tiempo para sentirte bien.
3 – Ahorrar (ahora sí)
¿Con ganas de viajar o de comprar algo que tanto querías? Es posible y no tienes por qué endeudarte para lograrlo. Ahorrar es una de las formas más fáciles de conseguirlo. Además de ayudarte a tener en orden tus finanzas, te puede servir para conseguir algo que estabas deseando desde hace mucho tiempo.
¡Y no tienes por qué ahorrar enormes cantidades! Si te cuesta guardar dinero, prueba al inicio con pocas cantidades diarias. Q5 o Q10, un vuelto que te sobre, puedes guardarlos en alguna alcancía. Si lo haces constantemente, verás que la cantidad crecerá y te servirá para algo.
O también puedes ahorrar evitando comprar algo que siempre haces pero que no necesitas. Por ejemplo, si te compras un café todos los días. No tienes por qué dejar de tomar café, tranquila, pero puedes buscar alternativas, como preparar tu café en casa y llevarlo. O solo comprar los martes y jueves, no todos los días. Verás cómo esos Q15 o Q25 de tu bebida pueden servir para ahorrar.
4 – Cuidar tu salud (durmiendo bien)
Hay tantas formas en las que podemos cuidar nuestra salud, como haciendo ejercicio o comiendo una dieta adecuada a nuestro cuerpo y estilo de vida. Sin embargo, una de las más sencillas es durmiendo.
¡Sí, durmiendo! Quizás no lo sabías, pero dormir es algo importantísimo para el ser humano y no hacerlo de la manera correcta es bastante peligroso. Depende de tu edad, pero las personas deben dormir entre 7 a 9 horas diarias. Trata de que no sea menos que eso ni más que eso.
Porque descansar bien te hará pasar un mejor siguiente día. Así que si tienes que levantarte a las 6 de la mañana, trata de dormirte a las 10. O bien, cuando ya vayas a acostarte, no uses tu teléfono. La luz blanca te quita el sueño. Si quieres descansar pronto pero no tiene sueño, trata de leer un libro o escribir. Las redes sociales pueden esperar hasta el otro día.
5 – Sentirte mejor (conociéndote y expresándote)
Hay quienes deciden que el próximo año tratarán de leer más. Y si bien leer es una gran actividad y un buen hábito, hay otro que suele ser ignorado: escribir.
¿Has tenido un diario? ¿Has escrito algún cuento? Escribir sobre una es una buena manera de conocer y expresarnos. Puedes comprar un cuaderno y relatar tu día. Eso te ayudará a reconstruir lo que pasaste y reflexionar sobre lo que te pasó. También sirve para lidiar con momentos tristes y guardar los alegres.
Llevar una bitácora personal es una vía para contar sobre ti sin que todos los demás lo lean. Son tus palabras, guárdalas para ti en un cuaderno. ¡Haz la prueba!
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