Tomar medidas drásticas para bajar de peso no solo resulta poco efectivo, sino también perjudicial para el cuerpo. Entérate por qué.
Muchas personas viven tan preocupadas por su peso que deciden someterse a dietas muy estrictas o, en el peor de los casos, dejan de comer, lo cual al final solo trae secuelas negativas para el organismo. Estas son algunas de ellas.
Te quedas sin energía
El organismo se alimenta de glucosa, la cual se obtiene de todos los alimentos que consumes a diario, así que eliminarlos de tu dieta hará que pierdas energía y vivas agotada.
Tu cerebro se debilita
Al dejar de comer por muchas horas tu cerebro se queda paralizado provocando que varias neuronas se dañen. Recuerda que los tejidos se alimentan de ácidos grasos y glucosa, y al no haber nada de esto en el organismo, el sistema nervioso se daña.
Tu metabolismo baja
Al no comer suficientes calorías, el metabolismo comienza a ponerse lento, afectando tu proceso digestivo, obteniendo el efecto contrario.
Tu humor se altera
La frustración de dejar de comer hace que tu humor cambie de forma brusca, lo cual también genera ansiedad y estrés.
La masa muscular se reduce
Cuando el cerebro nota la ausencia de glucosa, el organismo recibe la señal de utilizar la masa corporal para obtener energía, haciendo que esta se reduzca.
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Fuente: nutricionista María de los Ángeles Arévalo, marevalor@ufm.edu
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