Hay muchos hábitos que por muy normales que parezcan, pueden resultar molestos y hasta ofensivos para tus compañeros de trabajo. Además, pueden arriesgar tu puesto en la empresa.
Toma nota de qué “costumbres” debes dejar a un lado a partir de hoy.
Ser impuntual
Aunque creas que esto no es importante, sí lo es. Llegar tarde a todos lados habla muy mal de tu profesionalismo pues demoras tus compromisos laborales. Si quieres mantener un perfil responsable y productivo, mide tu tiempo y cuida tus horarios.
Quejarte
Si algo no te gusta de la empresa platícalo con quien corresponda y evita comentarlo con tus compañeros. Divulgarlo a los cuatro vientos solo dará la pauta a que empiecen a circular rumores, los cuales alteran la estabilidad de todos y crean un ambiente hostil.
Discutir frente a todos
El respeto y la ética profesional son importantes en todo trabajo. Discutir o llamarle la atención a los demás delante de terceros alterará el ambiente laboral. Todo tiene su lugar y momento. Lo mejor es buscar un espacio privado para dialogar sobre el inconveniente.
Hacer llamadas personales
Está bien que hables en algún momento del día, sobre todo en caso de emergencias, pero pasarte el tiempo hablando con tus familiares o amigos no es nada profesional. Evita hacerlo en horas de trabajo y mejor aprovecha tus momentos de descanso.
Decir groserías
Por muy divertidas que puedan sonar, no es recomendable decirlas, esto solo reflejará tus malos hábitos y un alto nivel de vulgaridad. Cuida tus palabras y sé respetuosa.
Descuidar tu higiene
Desde el momento en que te levantas debes cuidar hasta tu aliento, no hay peor cosa que dialogar y compartir por horas con una persona que no cuida su higiene personal. Evita los malos olores y preocúpate por lucir impecable.
Fuente: Mas de 100 consejos para mejorar tu vida profesional, de Richard Lowe.
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